Samantha B. Slater [Expediente]

{#}Información Básica

■ Nombres: Samantha Bambi ■ Apellidos: Slater McCallister ■ Edad: Veinte años ■ Fecha de Nacimiento: 15 de Julio de 1991 ■ Nacionalidad: Alemana ■ Sexualidad: Mujer ■ Orientación Sexual: Heterosexual ■ Grupo: Estudiantes & Modelos ■ Empleo: Modelo

{#}Apariencia Física

Cabello:

Con la inteción de que porfín diferenciasen entre ambas dos hermanas. Samantha sigue llevando el pelo largo, pero el suyo es ligeramente más corto y siempre lo lleva ondulado con un firme moldeamiento.

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Ojos:

Sus ojos van en perfecta harmonía con su rostro, son de un color castaño y son grandes y expresivos. Adornados alrededor con unas pestañas ya largas de por sí.

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Tipo de Piel:

Caucásica

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Complexión Física:

Posee, gracias a sus años de animadora, una figura atlética con curvas voluptuosas, acentuando un cuerpo delgado y bastante firme.

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Altura:

170 cms.

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Otras Características:

Siempre ha estado interesada en el asunto de la moda y el estilo, por lo que su estilo varía casi siempre que puede. Lleva desde pantalones ceñidos con camisetas y chalecos hasta vestidos con unas simples cuas y un bolso a juego, pero suele caracterizarse por colores oscuros. Aun así, lo que NUNCA le va a faltar sea la vestimenta que sea, son los tacones, es una adicta a ellos y su principal característica.

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{#}Personalidad

Gustos:

+ Las películas de terror + Los helados de limón + Bailar y tocar el piano + Los gatos + Tomar el sol + La moda

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Disgustos:

# La lectura # Su hermana # Las películas románticas # Los perros # El patinaje # Su segundo nombre

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Miedos & Fobias:

~ Las arañas y las serpientes en general ~ Los payasos

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Otros:

# Al ser Cheerleader en el instituto de donde provienen, tiene una gran cualidad para el baile y el equilibrio. Sin embargo, desde pequeña, ha desarrollado una gran fobia a no tener los pies en la tierra ¿Más explicaciones? las cosas con las que sus pies se eleven del suelo. Así como patines o bicicletas, le gustaría patinar sobre hielo como lo hace su hermana, pero desde que sufrió aquel accidente no se fia mientras la planta de su pié no toque el suelo. # Al ser la más allegada a su padre, aun habla el Alemán mejor que su hermana, método que usa para comunicarse con su padre para que esta no se chive a su madre de las cosas que ambos dos tienen en mente. Ya sea cuando ella se escapa para ir de fiesta, o cuando él trae a bonitas dependientas o secretarias a casa.

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Hobbies:

# Bailar # Sacarse fotos con toda la ropa que tiene # Ir de compras # Los chicos

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DESCRIPCIÓN PSICOLÓGICA

Ay las Cheeleaders... cuanto daño hemos hecho...
"Queen Bs & her Wannabees" (Película favorita de Samantha)

Exacto, que se puede esperar de una Cheerleader de todo instituto? Inluso en Inglaterra, la jerarquía de los institutos sobresale por encima de los estudios y Samantha fue llegando a una de las escalas sociales más altas por métodos propios. Es una chica entregada a las fiestas, no siempre rodeada de las mejores compañías pero sabe que sin ellos no podría haber vivido su último año en el instituto como una auténtica celebración de gloria en un "imperio". Es extrovertida, risueña y muy carismática. Es extraño la capacidad de convicción que tiene esta chica pero si quiere algo, por un modo u otro acabarás accediendo a ello. Sin embargo, la amistad no es un campo esencialmente importante para ella. Sabía que, tras el instituto, muchos de aquellos "populares" terminarían siendo cajeras en un supermercado, siendo madres adolescentes o alguna, con suerte, modelo. Por lo que no le importó pisar muchas manos y espaldas para ascender a donde quería. Traidora? Por supuesto, vendía a cualquiera que ya no le sirviese a cambio de un beneficio mayor y nunca le importó, pues su lema siempre fué "Mejor tu que yo". Pero era lo suficientemente astuta para que la gente no se diese cuenta de sus actos. No por ello significaba que no les durasen sus amigas. Tuvo un círculo íntimo desde tercer curso, con las cuales acabó el instituto. Fueron las únicas con las que Samantha demostró una auténtica amistad, era cariñosa, amable, detallista y totalmente leal y sincera. Se enorgullece de haber sido la primera jefa animadora no-rubia o negra. Y es que si, lo dijo en su día de manera tan desagradable.

Es orgullosa como la que más y pocas veces perdona a pesar de saber que en cuanto a inflingir daño, ella es la primera asesina con "Dollface" como era apodada en el instituto por la gente que la acusaba. El grupo de "haters" de Samantha llegó a un número inexplicable en su último curso... por qué no la tiraron del pedestal entre tantos? fácil, su número de admiradores y aliados era aun más grande y poderoso. La gente no puede tacharla de tonta, sabe que, tras el mal implantado en el instituto, y cuando la gente madurase, dejaría de ser aquella popular animadora para ser la odiada y repudiada en la universidad o en las cenas de ex-alumnos. Por lo que, con la excusa de madurar, ha mostrado muchas más sonrisas falsas en seis meses que en toda su vida, mientras no consiga volver a su posición en la misma universidad (cosa que le ha dejado de importar, pero fue con el pensamiento con el que ingresó a esta) no volverá a sacar la "diva que lleva dentro".
En cuanto a los temas del corazón, Samantha pertenece a esa nueva generación de chicas que defiende el sexo sin amor y el feminismo. Si un tío se tira a cinco mujeres es un campeón, por que si es una chica, es una zorra? No le importa lo que la gente piense de ella, nunca ha tenido una relación estable y está genial disfrutando de su soltería. Muchos chicos (algunos profesores incluso) han pasado entre sus sábanas y han hecho que Samantha quiera seguir por ese camino mucho tiempo. Es una chica que no busca desayunar con quien se acostó, ni siquiera recordar su cara. Por eso, su ambiente son las discotecas donde, al día siguiente, se despierta con algunas notas de excusa, las cuales lee riéndose y se va a hacer lo suyo tan tranquila. Cree que el amor es una invención del siglo XIX y que ya no existen cosas como esas ni tíos que puedan hacerla sentir así. Aunque envidia ligeramente a su hermana por llevar una relación seria casi desde que empezó el instituto.

{#}Información de Vida

Padres:

Arnold M. Slater [Padre]: De antecedencia Alemana y padre de las dos niñas, las ha cuidado siempre como si fuesen su tesoro. Incluso después de que sus padre se divorciasen a los 14 años de las niñas. Es un fiestero y un liberal, siempre que les dejaba el fin de semana de custodia, apenas lo veían por casa (al menos Serena, que era quien no le acompañaba) Kimberley S. McCallister [Madre]: Una chica londinense que se mudó en un programa de intercambio a la casa de una chica, cuyo hermano sería el futuro marido de Kimberley. Una mujer que aun sigue trabajando como comadrona en el hospital regional. Tras el divorcio, se centró en sus hijas y su trabajo, culpando a Arnold de la creciente mala actitud de Samantha y, en vez de intentar corregir a la pequeña rebelde, se centró en atar mucho más a Serena para que no fuese como su hermana.

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Hermanos:

Serena R. Slater: Es su hermana gemela, nació diez minutos más tarde que Samantha y, aunque naciendo el mismo día, siempre ha notado los mimos por ser "la niña pequeña". Se lleva bien con ella e incluso tienen tardes enteras hacéndose cosquillas, opinando sobre chicos o incluso maquillándose y bailando sin sentido como cuando eran pequeñas. Pero ambas dos se fueron por caminos sociales tan distintos que de puertas para afuera son casi enemigas, se reniegan la una a la otra por puro orgullo.

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HISTORIA

Con estudios comienza y con estudios acaba...

Samantha y Serena Slater nacieron un quince de Julio de mil novecientos noventa y uno en Berlín, Capital de Alemania. Sus padres, los cuales se habían conocido durante un viaje de estudios de Kimberley, una Londinense joven e inexperta en el campo del amor. La cual cayó perdidamente enamorada del hermano de la chica de la casa donde se acogía, para su desgracia, Arnold era todo lo contrario a la palabra "amor" que ella tenía tan idealizada por aquella época Hippie. Era uno de esos que se emborrachaba y provocaba peleas, vestía chaquetas de cuero y adoraba el sexo, ya fuese con su novia actual o con cualquiera que se le cruzase. Al acostarse (y desvirgar) a Kimberley, esta cayó profundamente enamorada de las promesas de bajarle la luna. Cuan equivocada estaba...
Los meses que pasaron allí se convirtieron en un infierno donde odiaba con toda su alma a aquel muchacho y que, sin embargo, no podía evitar caer en la tentación cada vez que él la tocaba. Sus estudios bajaron notoriamente, haciendo que la beca de esta quedase anulada y tuviese que volver a Londres. Ella lo aceptó casi con esperanza, sabía que cuanto antes se alejase de aquel rompecorazones, mejor le iría. Pero, lo que no sabía, era que Arnold ya no se acostaba con ella por puro amor.

La historia en sí fue bastante bonita según opina su madre, su padre temrinó por perseguirla hasta Londres y confesar su amor y bla bla bla... cosas que, tras el divorcio, se fueron olvidando y, por lo tanto, perdiendo valor.
Ambas dos gemelas ya nacieron con distintos carácteres. La primera en salir, sufría de hiperactividad y rompía todo lo que tocaba. Ya desde pequeña estuvo en grupos de niños y niñas por saber como encajar con la gente, pues el don de gentes vino de su padre. Según dice este. La segunda, nació dormida (y en opinión de Samantha aun lo sigue). Una niña tranquila que casi nunca lloraba y prefería quedarse leyendo en casa o jugando con Peeves, aquel Beagle pequeño y saltarín que tan mal se llevaba con Samantha por tirarle esta siempre de las orejas. Mientras que Serena tenía su cuarto lleno de peluches y las paredes pintadas de rosa, Samantha prefirió un estilo más ordenado y maduro por su parte, con las paredes azules y solo con libros de clase además de dos armarios. Las dos chicas crecieron en sus mundos, pero, cuando más se incrementó esa distancia que las separaba fue en aquella horrenda discusión en la que, ni siquiera Samantha, le da la razón a su padre.

Una noche escucharon a sus padres gritar, ambas dos observaron la escena desde la escalera, una acalorada discusión entre sus padres hablando de un tal Michael, su madre lloraba histérica hasta que le tiró un plato llamándole estúpido y demás cosas. Aquella noche no fue un gran recuerdo de las hermanas, por eso, las dos, según la futura psicóloga de familia, bloquearon aquellas imágenes. Su padre le propinó un bofetón a su madre y esta cayó al suelo, por un momento, inconsciente. tras eso, llegaron los juicios por las custodias, los fines de semana compartidos y demás. Samantha se dejó llevar por unas compañías no muy agradables así como de la bebida con tan solo 15 años (además de otras cosas que no confiesa) por su debilidad. Volviéndose un fantasma popular, rebelde y ninfómana.
Por otra banda, Serena se refugió en su madre sin entender el cambio de su hermana, se peleaban constantemente y por cualquier cosa, culpaba a mamá de todo e incluso llegaba a desaparecer de casa un par de días. Lo raro era, que sus notas parecían no bajar demasiado, solo por las faltas de asistencia y es que, Samantha, en el fondo, no quería eso para ella misma, por lo que, de los "rebeldes" pasó a los "populares" por método de sus estudios y resultado de sus fiestas.
Ambas dos terminaron el instituto sin repetir ningún año y, tras las oposiciones, su madre compró un piso en conjunto con su padre para las dos (Cosa que Samantha intentó evitar alegando que 18 años eran suficientes como para seguir viviendo con su hermana) pero, en aquel momento, la falta de dinero de la chica le impidió cambiar de parecer. Ahora las dos van en su segundo año de Carrera, las dos separas por diferentes facultades pero en la misma ciudad y casa, no es que discutan todo el día, pero literalmente son el Ying y el Yang.