Becca´s Relationships

Los profesores de historia son aburridos, ¿no? Al menos esa es la idea que uno tiene cuando piensa en esa asignatura —o carrera—, si ese es tu caso, piénsalo de nuevo. Rebecca se puede ajustar en parte a esa descripción cuando se la ve metida durante horas y horas y más horas en la Biblioteca, llena de libros y papeles, cuando está en su despacho o está en sus clases, pero si uno se mueve hacia otras partes de su vida se dará cuenta de lo diferente que es. Es activa, dinámica, divertida, extremadamente sensual, un cúmulo de sorpresas, rápida, adora la velocidad, el riesgo, la sensación de adrenalina. Nunca se la verá parada, siempre estará haciendo algo, lo que hace que muchas personas sean incapaces de seguirla el ritmo. Le gusta exprimir la vida, cada segundo, cada minuto, como si fuera el último y desgraciadamente sabe que es así, que en cualquier momento uno se puede ir sin siquiera tener tiempo a despedirse.

Inteligente, estudiosa incansable, siempre se adentra a todo como si se tratara de un reto. Es competitiva, un tanto cabezota y terca, tremendamente independiente y libre. No le gusta que le aten, no le gusta la sensación de ahogamiento y odia que le estén encima todo el día, quizá fuera esa la razón por la que su matrimonio fracasara. De reacción rápida, impulsiva en ocasiones, sobre todo cuando su nariz le dice que hay algo interesante justo delante, puede lanzarse sin pensar en la aventura. Le gusta creer que piensa antes de actuar, pero en ocasiones es todo lo contrario, aunque es cierto que para su vida profesional tiene todo organizado punto por punto. Amiga de sus amigos, protectora hasta límites insospechados, le encanta pensar que sería capaz de hacer cualquier cosa por ellos. En el ámbito amoroso, sin embargo, es cerrada, inalcanzable, el desengaño de su exmarido le ha hecho desconfiada frente a los hombres. Aun así, en el fondo es una maldita romántica que sueña demasiado y se forme castillos en el aire, porque sí, Becca también tiene la capacidad de quedarse ensimismada en su propio mundo de vez en cuando.